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El cáncer extrahepático de los conductos biliares es raro y afecta más comúnmente a personas de más de 65 años. Generalmente es tratado con cirugía, y pocas veces con quimioterapia, radioterapia y terapia fotodinámica.
ÍNDICE
Tipos de cáncer biliar
La bilis es un fluido digestivo que ayuda a descomponer las grasas. Se produce en el hígado y se guarda en la vesícula biliar. La bilis pasa luego al intestino delgado para ayudar a descomponer los alimentos grasos. Los conductos biliares son los tubos que conectan el hígado y la vesícula biliar al intestino delgado.
El cáncer de los conductos biliares casi siempre comienza en un tipo de tejido llamado tejido glandular y es llamado en ese momento como adenocarcinoma.
Si el cáncer comienza en la parte del conducto biliar que se encuentra dentro del hígado, es llamado cáncer intrahepático de los conductos biliares.
Este tipo es tratado de la misma manera que el cáncer del hígado.
Si comienza en el área de los conductos biliares fuera del hígado, se llama cáncer extrahepático de los conductos biliares y es del que hablaremos a continuación.
Síntomas del cáncer de los conductos biliares
Los síntomas del cáncer de los conductos biliares puede incluir:
- amarilleamiento de la piel y el área blanca de los ojos (conocido como ictericia)
- orina de color amarillo oscuro
- heces fecales pálidas
- dolor leve en la parte superior del abdomen
- altas temperaturas
- pérdida del apetito o malestar
- pérdida de peso y cansancio
- picazón en la piel
Estos síntomas no son siempre debido al cáncer de los conductos biliares, pero si los tiene debe consultar a su médico.
Causas del cáncer de los conductos biliares
Los médicos aún no saben con exactitud por qué se desarrolla el cáncer de los conductos biliares. Sin embargo, algunos factores aumentan las probabilidades de desarrollar cáncer de los conductos biliares:
- Edad – es más común alrededor de los 65 años de edad
- Colangitis con o sin colitis ulcerativa – causa inflamación en los conductos biliares
- Quistes colédocos
- Cálculos crónicos en la vesícula
- Exposición a ciertos químicos usados en la industria metalúrgica o del caucho
- Infección con un parásito llamado fasciola hepática encontrado en el sur de Asia y África
- Fumar
Diagnóstico del cáncer de los conductos biliares
El médico le hará preguntas sobre sus síntomas y le hará un examen. Puede ser que le refiera a un médico especialista en cáncer (oncólogo).
Usted podrá necesitar hacerse las siguientes pruebas para confirmar el diagnóstico.
- Pruebas de sangre para examinar la función hepática
- Colangiopancreatografía Retrógrada Endoscópica (CPRE) – se obtienen imágenes del conducto pancreático y los conductos biliares usando un endoscopio (una cámara conectada a un tubo flexible) que se pasa a través de la boca. Se administra un anestético en spray para dormir la garganta, y puede ser que también necesite un sedante
- Colangiografía transhepática percutánea (CTHP) – se inserta una aguja a través de la piel hasta el hígado, se inyecta un tinte en el conducto biliar y se toma una imagen con rayos X. Para este procedimiento se necesita anestesia local
- Biopsia – se extrae una muestra de células o tejido del conducto biliar y se envía al laboratorio para el diagnóstico. Usualmente se hace cuando se lleva a cabo un procedimiento CPRE o CTHP
- Tomografías – pueden incluir ecografías, imágenes de resonancia magnética o tomografías computarizadas. Se realizan para examinar el hígado, la vesícula biliar y los conductos biliares para ver si el cáncer se ha propagado
Otras pruebas utilizadas para determinar qué tanto se ha propagado el cáncer incluyen:
- Una ecografía endoscópica – se usa un endoscopio con una sonda ecográfica para examinar el páncreas y los tejidos circundantes
- Una angiografía – se inyecta un tinte en la arteria principal que llega al hígado para examinar los vasos sanguíneos cerca del hígado, la vesícula biliar y los conductos biliares
- Una laparotomía – se hace una pequeña incisión en el abdomen para ver directamente los conductos biliares y los tejidos circundantes. Para este procedimiento se necesita anestesia general
Tratamiento del cáncer de los conductos biliares
El tratamiento depende de la posición y tamaño del cáncer extrahepático en los conductos biliares y de cuánto se haya propagado. Su médico discutirá con usted sus opciones de tratamiento.
Cirugía para el cáncer extrahepático de conductos biliares
Se puede recurrir a la cirugía para extraer el cáncer si éste no se ha propagado más allá de los conductos biliares. Esta opción no es apropiada en todos los casos ya que los conductos biliares se encuentran en una posición difícil, y no siempre es posible extraer todo el cáncer.
Si no es posible extraer el cáncer, puede que el cirujano sugiera una cirugía de baipás gástrico para aliviar los síntomas de ictericia. Esto permite que la bilis fluya directamente del hígado al intestino delgado.
Inserción de catéter
Puede utilizarse la inserción de un catéter para ayudar a aliviar los síntomas de la ictericia sin necesidad de realizar una cirugía. Un catéter (pequeño tubo hueco) se aloja en el conducto biliar para permitir el flujo de bilis. Esto puede realizarse mediante un procedimiento CPRE o CTHP.
Procedimientos no quirúrgicos para el cáncer de conductos biliares
- Radioterapia. Se utiliza radiación para matar las células cancerosas. No siempre es apropiado para tratar el cáncer de los conductos biliares. Algunas veces se administra junto con la quimioterapia.
- Quimioterapia. Se utilizan drogas anticancerosas para destruir las células cancerosas. Generalment se inyectan en una vena, pero a veces se administran en tabletas. Los médicos están analizando qué tan efectiva es la quimioterapia para tratar el cáncer de los conductos biliares.
- Terapia fotodinámica. Se inyecta en una vena una droga sensible a la luz, la cual viaja a través del cuerpo y absorbida por las células. La droga entra a más células cancerosas que a células sanas. Luego se pasa un láser sobre las células para activar la droga, la cual mata las células. Aún no está claro qué tan efectivo es este tratamiento.
Viviendo con cáncer de los conductos biliares
Después del tratamiento para el cáncer, son necesarios los chequeos regulares con el médico para averiguar si hay evidencia de que el cáncer haya regresdo. Si el cáncer ya se ha propagado, serán necesarias las visitas regulares con médicos o enfermeros especialistas para tratar y manejar los síntomas.
Recibir un diagnóstico de cáncer puede ser angustioso para usted y su familia. Los médicos y enfermeros especialistas en cáncer saben eso y le proporcionan el cuidado y el apoyo que necesita. También hay grupos de apoyo donde puede conocer a personas que pueden tener experiencias similares a la suya. Pídale consejo a su médico.
Preguntas y respuestas
Solamente puede tener una infección del hígado provocada por fasciola hepática si ha visitado ciertos países y comido pescado crudo durante su estadía. Si tiene la infección, tendrá los síntomas.
Explicación
Los dos principales tipos de parásito fasciola hepática que están relacionados con el cáncer de los conductos biliares son Clonorchis sinensis y Opisthorchis felineus. Los dos causan inflamación y cicatrices en los conductos biliares. Esto aumenta las probabilidades de desarrollar cáncer de los conductos biliares.
Los parásitos fasciola hepática son comunes en Asia, el norte de Africa, América del Sur y Europa del Este, y generalmente se contraen comiendo pescado crudo. Es muy poco probable contraer esta infección a menos que visite esas partes del mundo y consuma pescado crudo durante la visita.
Los síntomas de la infección pueden aparecer varios meses después de ingerir el parásito. Estos pueden incluir:
- dolor abdominal severo
- inflamación del abdomen
- altas temperaturas
- náusea
- diarrea
- pérdida del apetito e indigestión
Los síntomas de una infección crónica incluyen:
- dolor abdominal que viene y va
- ictericia
- anemia
Si cree que tiene o ha tenido una infección producida por el parásito fasciola hepática, debe consultar a su médico.
Eso depende de cuánto se haya propagado el cáncer y qué órganos ha afectado.
Explicación
Si el cáncer se ha propagado a varias áreas, puede ser necesaria una cirugía más complicada, como el procedimiento de Whipple. Este involucra la extracción de los conductos biliares, parte del estómago, parte de intestino delgado, el páncreas, la vesícula biliar y los nódulos linfáticos circundantes.
Usted necesitará estar en la unidad de cuidados intensivos por unos cuantos días después de la operación y luego continuar la estadía en el área de cirugía general hasta unas dos semanas. Pregunte al cirujano cuánto él o ella espera que sea su estadía para su tratamiento particular.
Usted recibirá cuidados paliativos que tratan los síntomas pero puede que no le curen. Esto le ayudará a sentirse mejor durante el día a día.
Explicación
Su médico podrá elegir tratamientos como quimioterapia, radioterapia y terapia fotodinámica para reducir el tamaño del cáncer, o para ayudar a aliviar los síntomas si no puede curarse.
Hay dos operaciones que su médico puede sugerir para ayudarle a aliviar los síntomas de la ictericia.
- Insertar un catéter – este es un tubo hueco de cinco a 10 cm de largo y del ancho de un lapicero que abre el conducto biliar y previene la acumulación de bilis. Usualmente debe ser reemplazado cada tres o cuatro meses
- Cirugía de baipás – se realiza cuando la vesícula biliar o la parte del conducto biliar que no ha sido afectada es conectada directamente al intestino delgado, sin pasar por el área bloqueada en el conducto biliar, permitiendo el flujo de bilis desde el hígado hasta el intestino delgado
Su médico podrá explicarle cómo le ayudará el tratamiento para aliviar sus síntomas.
Más información
Macmillan Cancer Support
Tel 0808 808 0000
www.macmillan.org.uk
Fuente
- Cáncer de los conductos biliares (colangiocarcinoma). Macmillan Cancer Support. www.macmillan.org.uk
- Acción contra las lombrices. Organización Mundial de la Salud (OMS). www.who.int
Esta información fue publicada por el equipo de Bupa de información sobre la salud, y está basada en fuentes acreditadas de evidencia médica. Ha sido sometida a revisión por médicos de Bupa. Este contenido se presenta únicamente con fines de información general y no remplaza la necesidad de consulta personal con un profesional de la salud calificado.
Fecha de publicación: 2021