Persona sufriendo mareo y visión borrosa al hacer ejercicio.

Actividad y ejercicio

¿Mareo y visión borrosa al hacer ejercicio? Descubre qué lo produce

S entir mareo y visión borrosa al hacer ejercicio puede ser más común de lo que piensas. En la mayor parte de los casos se debe a que el oxígeno o la sangre no llega de forma correcta al cerebro, golpes de calor, bajadas de tensión, sobrecalentamiento o deshidratación.

Al realizar ejercicios, nuestro cuerpo requiere transportar una mayor cantidad de sangre a los músculos y muchas veces la que llega no es suficiente. Es por esa razón que sentimos mareos, tenemos visión borrosa o incluso, llegamos a sentir náuseas.

ÍNDICE DEL ARTÍCULO

¿Cuáles pueden ser las causas de tener mareo y visión borrosa al hacer ejercicios?
¿Qué hacer al sentir mareo y visión borrosa al hacer ejercicio?
¿Cuándo debes consultar al médico?

¿Cuáles pueden ser las causas de tener mareo y visión borrosa al hacer ejercicios?
Algunas de las causas más comunes de sentir mareos y tener visión borrosa al ejercitarte pueden ser las que vamos a enumerar a continuación:
Deshidratación
Cuando hacemos ejercicios, la temperatura del cuerpo necesita ser regulada, el cuerpo se sofoca y por medio del sudor se logra un equilibrio. Es por eso que beber líquidos ayuda a reponer la cantidad de líquido que se pierde.
Se debe beber agua antes, durante y después de la actividad física y en épocas de calor fuerte como el verano, aunque no se entrene. Es recomendable beber al menos 2 vasos de agua antes de comenzar a realizar ejercicios. Te comentamos más al respecto de la hidratación y el deporte en el post que te dejamos en el enlace.
Las bebidas isotónicas aportan electrolitos y glucosa, lo que nos ayuda a no sentir mareos, taquicardias, somnolencia o calambres.
Esfuerzo excesivo
Esto ocurre cuando la persona realiza un esfuerzo mayor al que puede soportar en una actividad física. Realizar un sobreesfuerzo puede hacer que se sientan náuseas, mareos, aturdimiento, vómitos, sed, dificultad al respirar e incluso desmayos.
Por esta razón es importante contar con la asesoría de profesionales del deporte y la salud deportiva que puedan guiarte sobre la forma correcta de realizar los ejercicios e ir aumentando los esfuerzos de forma progresiva. Este especialista te indicará si la rutina que estás realizando está bien para ti o debes cambiarla un poco para adaptarla a tus necesidades.
Falta de oxígeno
Al realizar ejercicios, los músculos demandan mayor cantidad de oxígeno, lo que hace que la frecuencia cardíaca aumente y se acelere la respiración. Si no se respira de forma adecuada o profunda, el nivel de oxígeno que llega al cerebro es muy poco y se producen mareos.
No debemos olvidar respirar correctamente cuando realizamos ejercicios. Esta falta de oxígeno al cerebro puede ocasionar además de mareos, en el peor de los casos, desmayos y podemos lesionarnos si nos encontramos sobre máquinas en movimiento o levantando pesas.
Usar máquinas en movimiento
Las cintas para correr o las máquinas elípticas pueden hacer que una persona se maree porque se mantienen en movimiento continuo, pero al dejar de moverse, la persona puede llegar a sentir que continúa en movimiento llegando a darle una sensación de vértigo.
El aturdimiento que se puede experimentar por el movimiento del medio donde te encuentres se conoce como cinetosis. Te contamos más acerca de ella en el artículo que te hemos dejado en el enlace.
Presión arterial baja
El mareo y visión borrosa al hacer ejercicio puede ser también a causa de una presión arterial baja. Recordemos que una presión normal debe ser menor a 120/80 milímetros de mercurio (mmHg).
Se considera que una persona tiene presión arterial baja o hipotensión cuando está en una lectura menor a 90/60 mmHg. La presión arterial suele bajar a las 81 horas después de hacer ejercicios, pero hay personas que pueden tener bajadas repentinas y sentir mareos, visión borrosa, fatiga, palpitaciones, falta de concentración, etc.
Deficiencias nutricionales
Sentir mareos puede ser síntoma de una alimentación poco balanceada o insuficiente. Cuando se entrena, el cuerpo requiere de energía suficiente y de todos los nutrientes, por eso alimentarse de forma adecuada es sumamente importante. A este respecto, te explicamos cómo comer saludable en el artículo del enlace anterior, te recomendamos su lectura.
Comer bien evitará que sintamos desfallecimientos que vayan de la mano con el metabolismo energético o el intercambio celular. Consumir alimentos altos en vitaminas del grupo B harán que el cuerpo funcione eficientemente y se eliminen esos síntomas.
Un mineral indispensable es el hierro, consumirlo de forma adecuada evitará que se presente anemia ferropénica, que interfiere en el estado de salud y el rendimiento físico.
Bajos niveles de azúcar
A esto se le conoce como hipoglucemia y se da cuando los niveles de azúcar en sangre son muy bajos. Al igual que ocurre con el oxígeno, el cuerpo demanda más azúcar mientras se realiza ejercicio. Cuando está bajo, se presentan mareos, irritabilidad, sudoración, fatiga, hambre, torpeza y ansiedad.
Esta es una buena razón para comer de forma adecuada antes de hacer ejercicios. Se trata de un problema que se presenta de forma frecuente, sobre todo en personas que se ejercitan por la mañana sin desayunar.
Arritmias cardíacas
Los mareos y la visión borrosa al hacer ejercicios también pueden deberse a una arritmia cardíaca que además presenta otros síntomas como sudoración, latidos irregulares, aturdimiento y desmayos.
Hacer ejercicios puede incrementar este padecimiento, pero ten en cuenta que, aunque estén presentes, no quiere decir que se padezca de un problema grave, por eso es importante consultar al médico.
¿Qué hacer al sentir mareo y visión borrosa al hacer ejercicio?
Después de conocer la causa de estos problemas, se deben tomar medidas para evitar en lo posible que sucedan. De no ser un problema de salud grave y después de una revisión médica, se pueden aplicar soluciones para hacerte sentir mejor.
En la mayoría de los casos, con simples técnicas se pueden obtener buenos resultados. Por otra parte, es importante realizar un calentamiento antes de comenzar a entrenar para evitar lesiones. También te recomendamos detenerte por unos minutos y respirar para ayudar a controlar el mareo.
Recordemos que el mareo ocurre a causa de un esfuerzo excesivo, una mala respiración o presión baja. Por eso realizar respiraciones profundas, descansar o colocar la cabeza entre las rodillas puede aumentar el flujo de sangre y mejorar el problema.
Si el mareo ocurre cuando se está en una máquina de movimiento, la recomendación principal es sujetarse fuerte hasta que sea seguro bajarse. También debemos ir bajando el ritmo lentamente para así evitar caídas peligrosas.
Mantener una buena hidratación es clave para evitar estas situaciones. Cuando se bebe suficiente agua o soluciones de rehidratación se pueden resolver estos problemas rápidamente. En tiempos calurosos, es mejor beber líquidos fríos para refrescar al cuerpo, y lo más recomendable es hacerlo poco a poco durante todo el día. La ingesta de carbohidratos saludables también ayuda a aumentar los niveles de azúcar en la sangre, tener a mano un plátano o algunos dátiles podría ser de mucha ayuda.
Para evitar sufrir mareos o tener visión borrosa al hacer ejercicios se debe entrenar subiendo la intensidad de forma gradual y no realizar esfuerzos excesivos. El pilates y el yoga, practicados de forma regular, ayudan a practicar una buena respiración. Te dejamos algunas posturas de yoga para todos los niveles que te pueden inspirar para empezar en esta práctica.
Alejarse del consumo de tabaco y bebidas alcohólicas también contribuye a tener una mejor resistencia ante la realización de ejercicios.
¿Cuándo debes consultar al médico?
Si los síntomas persisten es importante consultar con un doctor para que este se encargue de realizar todos los estudios necesarios y encontrar la causa del problema.
En el caso de experimentar arritmias cardíacas repentinas o muy fuertes, no se debe dudar en ir al médico. Si esto viene acompañado de pérdida de conciencia, fatiga extrema, incapacidad de retener líquidos o desorientación, la atención debe ser inmediata.
Es importante recalcar que, sentir mareos después de una intensa actividad física no es motivo de alarma. Primero debemos evaluar nuestra alimentación, la hidratación o la intensidad del esfuerzo. Ten un registro de todos los síntomas, anota que estabas haciendo al momento de sentir el malestar, esto podría ayudar al médico a tener más indicadores para realizar los exámenes pertinentes.
Se recomienda entrenar con un dispositivo que sea capaz de medir la frecuencia cardíaca. Es un aparato electrónico que lleva el control de las actividades diarias y te dará tranquilidad a la hora de entrenar. Además, te alertará si estás esforzándote demasiado y te dará un aviso para que bajes la intensidad o te detengas.
Recuerda que consumir algún carbohidrato que contenga un alto índice glicémico como melón, piña, sandía, plátano, kiwi o un batido de proteínas te mantendrá estable y si vas a realizar más de una hora de entrenamiento. Puedes parar para ingerir uno de estos alimentos y continuar, de este modo tu insulina se mantendrá en los niveles normales.